Cofrades Distinguidos1 - Cofradía San Telmo Frómista

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Cofrades originales y distinguidos.
Santos Guadilla. Cofrade polifacético. Referente y una autoridad dentro de la Cofradía.

Hay en la Cofradía personas originales. Baste citar el caso de Adrián Salomón y de Diego García Toribios, que pasean a San Telmo y El Ole por Europa en sus vehículos, como ya contamos en el reportaje anterior .
También hay cofrades singulares o distinguidos… y queremos ir dejando constancia de ello en nuestra Página Web; primero en reconocimiento a estas singularidades o méritos; también como ejemplo para todos de cómo viven nuestras tradiciones, de lo que Frómista, San Telmo o la propia Cofradía  significan para estas personas.
Hoy traemos a escena a un cofrade polifacético, que es referente  y una autoridad dentro de la Cofradía:  SANTOS GUADILLA.

Cofrade desde 1956, fue Mayordomo en los años 1978-1979 .
Secretario de la Cofradía durante un amplio período de  20 años, desde el 12 de abril de 1987 hasta el 1 de abril de 2007. Durante su mandato ,por ejemplo, se llevó a cabo la restauración en 2002 de la imagen de San Telmo del retablo de la parroquia; salieron por última vez las antorchas en El Ole, en  el año 2000;  o se efectuó la última visita a Tui en 2005.
Habitual de las procesiones y otros actos con su tambor o con la caja.  Se le ve –desde muy joven-  en fotografías en blanco y negro, junto a los Pluses,  tocando el bombo. También más recientemente, en el pasado San Telmillo, acompañando a los Danzantes. ¡Toda una trayectoria!



Quién no le recuerda en el ventano de la casa de San Telmo, durante años, haciéndonos disfrutar con el Sermón de  El Ole, tiritando muchas veces, pero siempre con ese humor irónico y su gracejo campechano, que la gente apreciaba nada más verle y con el que transmitía  emoción y sentimientos. Y ello a pesar de  que sus inicios fueron tiempos oscuros, con censura y  mal talante hacia quien osaba entrar en temas escabrosos o rebasar algunos límites. Había que callar y que siguiera la fiesta.  
En su etapa más reciente, se le  ve volcado en San Pedro –parroquia y sede de la Cofradía- , ocupándose lo mismo de la calefacción que de tocar las campanas ,según demande la liturgia del momento o la necesidad del día (Se sabe todos los toques reglamentarios).

Impropio llamarle "sacristán", pues sobrepasa ampliamente las funciones típicas de este puesto, habiéndose ganado la condición de amigo y persona de confianza de los sucesivos curas que en los últimos años han prestado su ministerio en Frómista.



Como no podía ser menos, este oficio y otros menesteres han dado lugar a que haya sido sujeto de algunas de las estrofas de los sermones de El Ole.
Por ejemplo estas  del sermón de 2001:

Sacristán nuevo tenemos
y no se lo digo en bromas
que nos cuida de la iglesia
y también de las palomas.
---
Sacristán de vocación
Desde joven con maneras
en su boca siempre Dios,
los santos y la Iglesia entera.
---
Pero siempre está en su puesto
es atento y servicial
ojalá nos dure mucho
"Santo" tan original.

Ya es un cofrade más, pero sigue pendiente de que no falte una flor  el día de la ofrenda al Santo , ni las tiras con Los Gozos, que reparte entre los desmemoriados. Ya se prodiga poco cantando alguno de Los Gozos, pero basta una mirada  suya  o un gesto para que los improvisados solistas  se ordenen y esmeren en las entonaciones.
O quién no le ha visto en El Ole reconvenir a quienes se desmandan en algún momento y no siguen las pautas de la  costumbre, arengándoles que "El Ole" hay que bailarlo, sin empujarse". Incluso ha ido guardando  y tratando con mimo algunos objetos de la Cofradía, que ahora están expuestos en el flamante domicilio social de la misma.
En síntesis, lo que decía al inicio:  cofrade polifacético y con una trayectoria ejemplar de servicio a la Cofradía, a Frómista y sus tradiciones. Referente para todos nosotros  y  una autoridad dentro de la Cofradía.  
Y ello amén de otros aspectos y facetas de su vida, también singulares: aficiones y costumbres propias de su forma de ser o de entender las relaciones y fruto de  su bonhomía. Hoy no toca hablar de éllas, pero darían mucho de sí, sin ninguna duda.


Le había propuesto una entrevista y unas fotos en San Pedro.

Me recibe en el banco en que se asienta la mesa petitoria de la Cofradía durante la Novena y con la cachaza que dan los años y la experiencia me dice " … si ya no me acuerdo apenas de nada… "

Lo que no es verdad, como  compruebo enseguida, al ir sacando temas y preguntas, acomodados en la sacristía, al solillo que entra por la ventana.
De los Sermones recuerda que él se hizo cargo del 70 al 79 y que  generalmente los leían dos, bien con su hermano Iluminado o con Eulogio. Cuando le pregunto por la censura, aclara que quien realmente la ejercía era el alcalde; lo del cura no es cierto, no se enteraba, a pesar de lo que dice la famosa estrofa que se recita en cada sermón. Y que es cierto que algunos años saltaban chispas; incluso un año el alcalde quiso leer él el sermón y por supuesto no le dejaron. Luego ya hubo  tolerancia y libertad para expresarse, aunque no todos lo han llevado bien.

Le pregunto por sus habilidades musicales y me cuenta que a los 15 años ya tocaba el bombo con los Pluses. Dos dulzainas, caja y bombo. Le pregunto quién le enseñó y contesta raudo que el Sr. Gregorio, aunque realmente tocaba de oído. ¿Quién va a continuar la tradición cuando lo dejes? En Frómista nadie, responde categórico. El dulzainero viene  ya con el caja.
Le pido que nos cuente sus inicios en la Parroquia, su buen rollo con los curas …  Recuerda que cuando deja de trabajar a los 58 años, allá por el año 2000, Julián Sainz –el cura de entonces- le propone hacerse cargo del Museo. Al fallecer Sobero, se hace cargo de las demás funciones. Sigue luego con los "Migueles, Luis Miguel y Miguel Ruiz, más tarde con Bolo y Rafa y ahora con Juan Carlos. Le provoco argumentando que creo que se puede decir que ha "socializado " a los curas  a base de bodegas y rondas, que eso con D. Alberto y otros anteriores no era posible. Se ríe socarronamente. Me dice, desde Julián todos lo han hecho. Vamos que  les va la marcha a todos,  como si les hubieras metido en la pandilla, le digo.  Vuelve a sonreir, pero no añade nada. Un gran cambio en la relación curas/vecinos a lo que el bueno de Santos no es ajeno.

No podía dejar de preguntarle por cosas de la Cofradía .
Acabamos de dar un repaso a la Página Web de la Cofradía –apoyados en el atril del presbiterio-  y se le notaba en los ojos curiosidad y sorpresa ." A eso yo ya no llego", se le escapa, a pesar de que  le ha gustado ver las fotos y algunos contenidos.
Lo primero que me dice es que esta nueva etapa le recuerda la de 1978, cuando otro grupo de personas  -"Carlos Vallejo de Secretario y yo de Mayordomo, porque no quería nadie"- se puso al frente y reactivó la Cofradía. Eran casi todos mayores y se fue parando con los años. Cree que es muy importante lo que ahora se está haciendo, pero que debemos implicar a más jóvenes , para  que sean ellos los que continúen la labor en el futuro.
Le pregunto si es prioritario recuperar la "casa de San Telmo" y si tiene alguna idea al respecto.Es de los que opina que esa casa es emblemática por cuanto estaba próxima a las puertas del Grajal, por donde se cuenta entró la reliquia de San Telmo. Que su porte no corresponde al estatus familiar del Santo. Con independencia de ello, no tiene dudas que es importante recuperarla para la Cofradía y para el pueblo. ¿Qué se puede hacer? Lo mínimo una capilla, y si hubiera dinero, además un local para sede de la Cofradía y para desarrollar otras actividades vinculadas al pueblo y a San Telmo. Remata que históricamente se justifica.
Otro tema que va a estar de actualidad es la Reliquia. Le  comento que "mucho lío y fiesta cuando llegó y después…"  Dice  que salía un día al año, en la procesión del Lunes de San Telmo. Por la tarde en la novena se besaba la reliquia. Hubo que cambiarlo a la misa mayor, porque a la novena faltaba mucha gente. Luego se la tenía guardada donde se podía. Ahora en el museo. ¿Te parece bien la idea de exponerla en San Pedro, con la lógica seguridad, y mejorar la información sobre  San Telmo y su trayectoria histórica a los que visiten el museo y la iglesia? Reconoce que no se habla apenas de San Telmo. Si alguien pregunta. Le parece una buena idea.

Sin preguntarle se refiere a "El Ole".  Cree que la salida es emocionante e inmejorable; que el sermón tiene tirón, pero sobre todo,  hay que  conseguir que la entrada de El Ole en San Pedro sea otro momento clave, porque tiene  emoción y encanto y muchos se lo pierden. Cree que para ello hay que mantener un horario y cumplirlo y también pide  a la Cofradía, a las peñas… que cuiden la vuelta hasta San Pedro, una vez acabado el Sermón, que desluce mucho. Así lo ve, así lo siente y además es que tiene razón.



Para terminar, quiero saber  qué cosa  -en su etapa de secretario- siempre quiso hacer y no fue posible.  No duda ni un segundo. Que las mujeres pudieran ser cofrades.  "Hay gente que ha dicho que yo no quería, pero no es verdad. Ahora que ya se ha resuelto, puedo asegurar que me he quedado muy contento. Eso es lo que me hubiera gustado conseguir".
Genio y figura. Un ejemplo para todos.
¡Salud! y el reconocimiento de la Cofradía por todos estos años y por serguir siendo un ejemplo y un referente.

Nos ha parecido pertinente contar también con algunos testimonios  de personas que le conocen bien o que han trabajado codo con codo  en los temas de la Cofradía o en otros.
El primero,  por muchas razones, es  L.Carlos Vallejo , a quien sobra presentar. Esto dice de Santos, amigo y colaborador de toda la vida  en estos menesteres :
"Santos Guadilla ha sido y será el mejor y mayor referente en todo aquello que tenga que ver con Frómista,  con S. Telmo y con la Cofradía de S. Telmo, no en vano es una de las personas que más tiempo ha permanecido en nuestra villa durante toda su vida: exceptuando unos días de pre-servicio militar y otros pocos de vacaciones, no se ha movido de Frómista. Desde hace muchos años, y gracias a su excelente memoria, conoce a sus paisanos no sólo por el nombre (es natural), sino por sus domicilios, aficiones, eventos, enfermedades, … Es decir, la mejor fuente documental para conocer cualquier detalle de la Historia reciente de Frómista.
Podría extenderme en glosar sus cualidades, que son muchas y reconocidas popularmente, pero eso será en otra ocasión. Personalmente, yo he tenido la suerte de estar muchos años muy cerca de él, en casi todas las facetas de la vida y, puedo asegurar,  que para mí entraña todos los valores que tiene una gran y sincera amistad ".
El segundo , por proximidad y rango, Juan Carlos Martínez, cura actual y Abad de la Cofradía . Así se refiere a nuestro personaje :
"Para mi decir Santos Guadilla, es decir: acogida, ayuda, acompañamiento, información, servicialidad, disponibilidad absoluta, memoria viviente, y sobre todo amigo y compañero de camino dentro y fuera de la parroquia. Tiene la capacidad y sobre todo la voluntad de acoger al que viene nuevo, acogerle tal y como es y  adaptarse a la formas de ser de cada cura que han pasado por Frómista. Nunca ha salido de sus labios, "es que siempre se han hecho así las cosas en la iglesia" o "los curas anteriores hacían estos o lo de más allá". Santos sabe muy bien que cada uno es original, único e irrepetible, con sus virtudes, aciertos, fallos o defectos. Para mi tanto en las cosas de la parroquia, del pueblo y de las cofradías (sobre todo de la de San Telmo y la Virgen del Otero),  ha sido el que me informaba y digo bien lo de informaba, que es diferente a imponer. Es mi mano derecha e izquierda, aunque "ahora" que han entrado en la sacristía las mujeres, las dos hermanas religiosas, me lo tienen un poco descolocado, más bien "descolocados y revueltos" todos los cajones de las dos sacristías", Santos, ante esto solo nos queda una cosa: oír, ver y callar.
Lo que más destaco es su servicio a la parroquia y a las personas de Frómista: "la puerta siempre abierta, la luz siempre encendida, la mano extendida, el calor a punto y adecuado, el leccionario de las lecturas en el día que corresponde, el pan y vino en su sitio, el misal en la mesa, el toque de campanas sea de alegría o de dolor, sonando a su debido tiempo, el museo con los otros "chicos" abierto para visitar... y un larguísimo etc……
Decir Santos Guadillla es decir: SER, ESTAR Y ACTUAR en todo momento, sea dentro o fuera de la iglesia
."

También ha querido aportar su  testimonio Rafael Guerrero , el cura anterior junto con Bolo. Original y cercano, como es su estilo :
"Tomando unos vinos por Frómista un sábado cualquiera, entraron en el mismo bar mis dos hermanas. Yo, de espaldas a la puerta, no me había dado cuenta de su llegada. Santos con una sonrisa socarrona en los labios dijo sin pensárselo dos veces: ¡ojo Rafa, que entra la ertxantxa!
La carcajada fue contagiosa. Y hasta las aludidas celebraron la ocurrencia. Hoy, pasados unos años, en mi familia la expresión de ese día es una "muletilla", en las conversaciones informales, para pinchar al tío que no se cuida como debiera.
Me he preguntado varias veces del porqué del éxito de esa ocurrencia. Y creo saber la respuesta. El ¡Ojo Rafa, que entra la ertxantxa! trasmite para nosotros rasgos característicos de una persona entrañable: SANTOS.
Santos y su chispa, Santos y su estilo personal, Santos y su sensatez aderezada de ese sentido del humor que hace reír sin ofender…
Acabo de leer un libro sobre liderazgo escrito por Valdano, el que fuera jugador y entrenador, entre otros equipos, del Real Madrid. Señala Valdano que para ejercer un liderazgo benéfico para el grupo, el líder ha de tener entre otras características el poder de la credibilidad, el poder del estilo propio, el poder de la palabra, el poder de la humildad, el poder de la simplicidad,  el poder del talento, de la sensatez…
Ahora me explico que hayas ejercido durante tanto tiempo como líder de la cofradía de S. Telmo, donde sin duda, hay personas con más libros, con más mundo, con más tablas… que han tenido la suerte de contar con gente como tú para hacer un equipo que ha sabido mantener viva la tradición más importante de Frómista."

Por último, hemos recurrido  a  Eugenio Renedo , cofrade meritorio, pero sobre todo amigo y fan antes que cuñado ,  para que aporte algo al mejor conocimiento del personaje :

"Lo que se puede decir del cofrade Santos, dada su popularidad, siempre va a resultar poco original y muy sabido por todos. Voy a intentar exponer mi opinión y quisiera también ser capaz de transmitir la estima que siento por él.
 Las palabras integro, discreto y servicial lo definen perfectamente. Yo le considero parte del patrimonio de Frómista, como son la iglesia de S. Martín, las esclusas del canal... o cualquier árbol de los enraizados en el lugar. Únicamente que, teniendo en cuenta que es un ser humano, acaso habría que compararlo con San Telmo, aunque nuestro santo universal, si la historia no miente, no estuvo tan permanentemente en el pueblo como el "Santo" Guadilla.
 Pocos días de su vida ha privado de su persona a la localidad. Exento del servicio militar, fue terrible para él cuando, hace años, la diosa Fortuna le hizo la mala jugada de agraciarle con un viaje a Tenerife de una semana de duración. Todavía recuerdo lo apesadumbrado que estaba cuando decía: "pero si yo he pasado poquísimas noches fuera de casa y jamás han sido dos seguidas". Sacarle de su pueblo es como  sacar a un pez de su medio líquido.
Su presencia en la Cofradía, en la parroquia, en las fiestas patronales, etc., es incondicional, siempre dispuesto a colaborar. Cuando llegan los curas nuevos se encuentran con el mejor aliado que pudieran haberse imaginado. Les ayuda en los quehaceres propios de la profesión y después de los oficios religiosos les pone en contacto con las gentes recorriendo las otras "iglesias", "ermitas" y "tabernáculos" donde la relación con los fieles se hace más fácil. Teniendo en cuenta este apoyo que le da al clero, será difícil que este hombre no se gane el cielo.
Muy aficionado a las tertulias de bodega siempre ha tenido un paladar exquisito para apreciar los buenos caldos…y también los menos buenos, para qué negarlo.
En cuestiones de salud, a la pregunta de: ¿Cómo estás?, la respuesta siempre será: ¡jodido! Tiene  verdadero pánico a los médicos y a los hospitales. Para ir a estos sitios siempre tiene que ser forzado.
Dicho lo dicho supongo que la conclusión es que, a este hombre no hay más remedio que quererle."

No nos ha llegado a tiempo el testimonio que habíamos solicitado a la Cofradía de Tui.

En casos tan relevantes y singulares como este, creo que debe considerarse la oportunidad de designarle MAYORDOMO  de HONOR en las próximas fiestas.   (Como se hizo con D. Ricardo el pasado año).

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